Llevo
mucho tiempo intentando escribirte algo y la verdad es que es
complicado, todos sabemos lo que siente un padre y una madre por un
hijo o hija, no voy a descubrir nada, pero nunca encuentro el momento
de expulsar mis emociones más sinceras porque,afortunadamente, cada
día se me acumula una nueva.
Hoy
cumples cuatro años y muchos padres nos emperramos lo que tienen que
hacer o no hacer con tu edad, lo que es lo lógico o ilógico, y en
lo que debes o no debes aprender..Perdóname si peco de eso, de
“Pepito Grillo”, como dice tu mamá. La profesión y los cánones
impuestos por la sociedad nos saturan a los adultos y a nuestros
hijos.
Curiosamente , los adultos, pedimos que te quites ropa de
forma autónoma, pedimos que no te hicieras pipí en la cama,
pedimos que comieras y durmieras solo, pedimos que al año
caminaras, que te te portes bien en un restaurante con 3 años,
etc...Te pedimos, nos piden que seas un adulto precoz y cuando los
adultos llegan a ser adultos de verdad, nos frenamos y pedimos
incansablemente ser siempre jóvenes, y queremos hacer millones de cosas que
frenen la caída libre de nuestros años. Vaya incongruencia, pedimos
madurez a niños y cuando llegamos a adultos deseamos ser siempre
jóvenes.
Pero
sabes una cosa, que todos los logros que vas consiguiendo me
enorgullecen, más de lo puedes imaginar, sean en el momento que
sean, antes, durante o después. Pero lo que más me llena de todo es
lo que nos das con tus actos diarios.
Me
encantaba cuando tomabas el pecho de mamá mezclando ansiedad y
ternura, y cuando te enfadaste contigo mismo y montaste en rebeldía
con tu madre cuando decidiste por ti mismo dejarlo. No sabes lo que
disfrutaba viéndote quedándote dormido en el sofá con mamá en las
tardes de invierno.
Disfruto
muchísimo viéndote comer, desde lo que más te gusta y hasta de lo
que no te agrada tanto, haciéndote minibocadillos de yogur o de
patatas y guarreando en exceso, como el cochinote de tu
padre...ajajaj
No
soy tu amigo, pero me divierto y me transformo en ello cuando hace
falta.Me encanta jugar al pilla pilla por el pasillo de casa, a
escenificar cuentos, canciones, a jugar a Hulk e Ironman,...
Me
vuelvo loco por el cuento de cada noche, los que tanto demandas, el
del sofá y el de la cama, y hasta el de las mañanas del
water...jejej
Esa
manita que pides todas las noches antes de dormir “¿Me das la
manita?”, o ese abrazo que pides después de 20 minutos en la
cama..”Mamá, ¿me das un abracito?”, imposible no ir, imposible
no asistir, me quedo rendido e hipnotizado ante tantos gestos de
cariño y amor hacia nosotros.
Los
sábados y domingos se convierten en especiales a primeras horas de
la mañana; nuestra mesa de madera baja, donde desayunamos con total
tranquilidad se convierten un refugio de placer; sin prisas, sin
estrés, desayunando tranquilidad y magia que salen en formas de
onzas de chocolate por detrás de tu oreja:”una para ti y otra para
mi”
Mientras
te seco después de la ducha llega otro momento muy divertido; tus
compras imaginarias en el supermercado de la placa ducha, tus cuentos
de superhéroes o de terror los cuales, que escuchas con mucha
atención mientras te voy poniendo el pijama y que terminan
salpicadas de Nenuco.
Y
qué decir mi atleta, de mi nadador sin tiempos ni ritmos, grande,
lento, dejándose caer encima alguien o de algo..hijo que eres muy
grande!!..Esa cervical que me vas hundiendo poco a poco, ese relax encima de tu mamá después de tu siesta, insustituible, y esos
cohetes 3, 2, 1..que aún logro poder hacer...
No
lo dudes, París, New York e Italia nos espera a los tres, no nos
queda otra que visitarlas...jajaja, y la gran temida por tus padres,
Semana Santa, se seguirán convirtiendo en tu mayor delicia, lo sé,
te encanta el sonido de una banda, el paso a horquilla y la imagen
de una cristo y una virgen.
Gracias
por disfrazarte casi a diario con disfraz y sin él, por sacarte de
esa cabeza distraída y derrochadora miles de historias y personajes.
Me
chifla y me hace temblar tu excesiva inocencia, demasiada diría
yo...Pero tu misma tendrás que descubrir los difíciles recovecos
de las personas. Tu papá y tu mamá siempre estarán en tu lado, en
lo bueno y en lo malo, con la intención de ayudarte a construir tu
vida, aunque tu padre siempre tienda,erróneamente, a cogerte la mano
hasta el final del camino.
Gracias
Angélica, por traer al mundo lo más importante de nuestras vidas y
lo más importante de tu vida. Gracias Pablo, por tu amor
desmesurado, por tus abrazos infinitos y tus besos sin horas.