Hablo
de la media maratón Bahía de Cádiz que se celebra todos los años
entre las ciudades de San Fernando y Cádiz.
Sinceramente,
me parece un insulto y una falta de cordura inmensa realizar un
recorrido donde ,el tramo correspondiente a la capital, siga un
intirenario casi fantasmal. Con todos mis respetos a la vital e
importante Avda.Juan Carlos I y sobre todo a la calle Retama donde
finalizaba tan emocionante prueba.
Participantes
de casi toda Andalucía y aficionados se sorprendían de tan “bello”
lugar de llegada y de su paradisiáco recorrido por esas “bonitas”
calles industriales.
Quien
haya participado o haya asistido a una actividad de este calibre sabe
perfectamente la de emociones que suscita entre los atletas; desde
conseguir un record para un deportista de élite, pasando por la
experiencia involvidable de un aficionado que entra en meta con sus
hijos y finalizando entre las lagrimas de varios corredores que
entran de la mano en señal de objetivo conseguido.
Dicho
recital de emociones no se merecen un intinerario gaditano tan
meláncolico. Animo a quién corresponda a intentar dar mayor
lucidez a esta prueba que cada vez tiene más adectos; casi 1300
personas se merecen un escaparate muchísimo mejor.
